
En 1970, el pueblo de Salinas de Guaranda -mina de sal- apostó por el cooperativismo como la forma efectiva y democrática de enfrentar la pobreza y marginación. En ese afán, el apoyo de voluntarios extranjeros y la Misión Salesiana fue crucial para lograr un cambio sustancial: pasar de un pueblo productor de sal sin cultura organizativa a una comunidad organizada y agroindustrial, con productos de clase mundial que hoy son un claro referencia para la provincia de Bolívar y el país. Flavio Chunir, Presidente Ejecutivo de El Salinerito, nos comenta que llegó a la población de Salinas de Guaranda como parte de un programa de voluntariado salesiano en 1986, también nos narra la historia de esta comunidad que nace de la necesidad, "una población sumida en la pobreza que a partir del impacto que tuvo la Misión originó un cambio "Agrega," la gente tomó esta oportunidad y decidió salir adelante como comunidad ". Primero se formó la cooperativa de ahorro y crédito para qu...